viernes, octubre 18, 2024

Tu ventana al mundo sostenible

Nuevo estudio identifica las zonas de cultivo más favorables para producir combustible sostenible de aviación a nivel mundial

Comparte

Una nueva investigación dirigida por BC3 revela estimaciones detalladas de las emisiones de CO₂ derivadas de los cambios en el uso del suelo para seis materias primas para la producción de combustible sostenible de aviación (SAF), que muestran variaciones globales significativas derivadas de los distintos rendimientos y las reservas de carbono del suelo. Combinando datos espacialmente explícitos, el equipo investigador calcula las emisiones de CO₂ procedentes de los cambios en el carbono del suelo y la vegetación tras el establecimiento de los cultivos.

CORSIA exige que las aerolíneas compensen sus emisiones de gases de efecto invernadero por encima de los niveles de 2019 mediante compensaciones de carbono o el uso de SAF. Los SAF, derivados de biomasa o recursos renovables, deben reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en al menos un 10% en comparación con el queroseno convencional y cumplir con otros criterios de sostenibilidad. Este estudio, dirigido por la investigadora de BC3 Neus Escobar, evalúa las emisiones de cambio directo de uso del suelo (DLUC) derivadas de la conversión in situ de los usos anteriores en cultivos para SAF, excluyendo bosques primarios, turberas, humedales y áreas de alta biodiversidad.

Al proporcionar valores DLUC y tiempos de recuperación de carbono con una resolución de 0,5 grados para seis tipos de SAF, la investigación revela nueva información sobre la viabilidad ambiental de estos combustibles. Los hallazgos, obtenidos por primera vez de manera espacialmente explícita, resaltan que el SAF de soja tiene el valor DLUC más alto en promedio, mientras que el SAF de jatrofa tiene el más bajo. Sin embargo, los resultados muestran una amplia variabilidad en las intensidades de emisión de GEI a lo largo de las áreas de producción. La investigación subraya la importancia de producir SAF en áreas donde las reservas de carbono son bajas y los rendimientos de los cultivos sean altos para maximizar los beneficios de GEI.

El estudio muestra áreas que cumplen con los criterios de sostenibilidad introducidos por el Plan de Reducción y Compensación de Carbono para la Aviación Internacional (CORSIA) y estima cuánto tiempo implicaría compensar estas emisiones reemplazando el queroseno. En las zonas que cumplen con CORSIA, el biocombustible procedente de soja tiene las emisiones más altas, mientras que la jatrofa tiene las más bajas. En particular, las plantas perennes como el miscanto, el panizo y la jatropha tienen un gran potencial para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en grandes extensiones.

“Por un lado, nuestros resultados pueden ayudar a los productores de SAF a optar por cultivos con bajo DLUC para cumplir con CORSIA; por otro lado, los tomadores de decisiones pueden identificar dónde se necesitan políticas más específicas para promover aquellas materias primas que ofrecen beneficios de GEI y aumentan el potencial de producción de SAF”. (Neus Escobar, investigadora de BC3 y autora principal del estudio)

Este estudio puede ayudar a los responsables políticos y a las partes interesadas de la industria, ya que proporciona datos detallados para promover el crecimiento sostenible del sector de la aviación. Al identificar regiones donde la producción de SAF puede reducir las emisiones de GEI, los resultados ayudan a cumplir los criterios de sostenibilidad de CORSIA y a fomentar un crecimiento neutro en carbono en la aviación.

«Nuestro estudio indica que la selección de materias primas para CORSIA en función de la intensidad de las emisiones de GEI a escala nacional puede limitar el potencial de producción en regiones específicas con condiciones agronómicas y ambientales favorables». (Neus Escobar, investigadora de BC3 y autora principal del estudio)

El estudio, financiado por los proyectos de investigación europeos ALTERNATE y GIFTS, recomienda más investigación para comprender plenamente las compensaciones en materia de sostenibilidad, las limitaciones financieras y el efecto del resto de criterios de sostenibilidad que entraron en vigor en 2024, ya que todo ello puede afectar el potencial de producción.

Ver más

Recientes